El Asunto Cubano: . Estados Unidos vs. "ULYSSES” iii/v

. Estados Unidos vs. "ULYSSES”

iii/v

Se cumplen 60 años de dictadura comunista en Cuba

“Un Asunto Angloamericano”

La “Gran Guerra” lacerante”

Preludios de una “Generación Perdida”

Todo el endrungue de esa generación radiante, le devino ya armado y santificado. Peor, sobre dimensionada como “una irrepetible Generación Perdida”, según expresión anecdótica de la escritora Gertrude Stein; muy amiga, casi intima, de Ernest Hemingway. Este, integrante descollado de aquel grupo de escritores que hicieron vida en el París de pos ‘I Guerra Mundial’ Un período fascinante y no menos estremecedor, de transformación de las artes todas, que bien pudo extenderse hasta entrados los decenios de los años 20- 30 y bordeando la derrota de los comunistas (bolcheviques) doctrina abrazada por los republicanos ibéricos, durante la “Guerra Civil Española”(1936-1939). Ello, dado que su significado para el lector lego, resultó todo lo contrario por ser un grupo de autores exitosos e imperecederos en la Literatura. Todo, tras ser catalizada y precipitada la adjetivación con resultados justos, en la retorta de los idealistas por desgracia, agoreros. Es por tratarse de una parte conspicua de la acuciosa Intelectualidad e Intelligenza en el ámbito mundial, anonada con los destrozos materiales, morales, sociales y psíquicos de algunos historiadores espantados con el desastre bélico.

De inicio, toda la pléyade de políticos, historiadores, analistas, militares, escritores y otros intelectuales; afines a los fenómenos sociales, decidieron denominar el conflicto como “La Gran Guerra” (después, ‘I Guerra Mundial’) Porque esa comunidad de pensantes creadores pobres, referidos a la Intelligenza denominada de ‘aporquesí’, como la cultura ‘latinoamericana’ (eventualmente europea) hicieron un 'gran total' del acunado mas tarde como "tanque de pensamiento" no muy alejado del un concepto semejante al de los 'enciclopedistas' del siglo XVIII. Una congregación, per se, de las mentes mejor dotadas, a los fines de definir la explosión y desborde cultural (incipiente) proveniente de la población aborigen o autóctona que puebla con aproximación aceptable, toda la región comprendida entre el Río Grande y la Patagonia.

Ello, incluyendo tierras adyacentes sin contar la Mesoamérica continental; tales son los o archipiélagos e islas del Caribe y otras cayeras similares. Envueltos todos, salvo itinerancias pro tempore en diferencias y conflictos, que enceguecen las imágenes pacíficas; emanadas de los abanicos culturales e idiosincrasias modestas o subdesarrolladas hasta mediados del siglo XX (excepto Cuba) de Centro, Sudamérica y el Caribe. En 1959, la irrupción de la subversión comunista en el área caribeña, sorprendió a las democracias dando al traste con el pujante impulso desarrollo las democracias como resultado económico mundial pos II Guer Mundial.

Es que, además, se repite el error anti cultural, como si fuesen tales corrales de ‘La Madre Oca’; cuando objetivamente; si observáramos los gentilicios gramaticales, en este caso los españoles; no dudaríamos en denominarla ‘Intelligenza indoamericana’ en específico, como los causantes del incremento de la subversión izquierdista y archi populista en las tierras de la Indoamérica, bajo la férula del Foro de Sao Paulo Esa especie de Comintern Latino repleto de intelectuales samberos, cariocas, rumberos y reciente, salseros de filosofías izquierdistas fracasadas, arribados ahora a playas democráticas, en barcarolas populistas. Ese es el drama actual de la "zurdera latinoamericana", junto a sus políticos izquierdistas que les patrocinan sus sinvergüencerías mutuas, de corrupción y latrocinios.

Algunos, incluyendo desde los premiados por La Habana castro-guevarista, hasta los Premio Nobel; hoy amagando estar en vías de arrepentimiento (sin disculparse por el daño hecho a sus sociedades democráticas a fin de sustituirlas por exotismos ideológicos como el comunismo, o el populismo simple; colgados de algún aventurero de entre los líderes predestinados, donde auparon la proliferación de los ‘tontos útiles de la zurdera’, proto-comunista. Recordar como tampoco existe el barbarismo de una expresión forzada de 'Intelligenza Angloamericana', en específico, para los EE.UU.

De ahí, el error de tal insolencia lenguaraz de acuerdo con la moda de los afectados por la denominada “chancleta mental”, de personajes chatos, mediocres y de perfil bajo; alborozados con sentirse miméticos con el guevarismo a ultranzas y sus fanáticos; hoy haciéndose los ‘desorientados’ (ellos son así de veleidosos) para cualquier tiempo en que nos coexistan y manifiesten vivencias, tal doblez (esperada) sucedió después con los madurados en la pos II Guerra Mundial, al perder éstos disimulados a sus “líderes máximos”. Para ellos, una especie de “crianderas lactante para y propia de párvulos” casi todos 'guerrilleros heroicos' según la jerga comunista; tal si esa denominación fuese un nuevo oficio moderno diplomado en Colleges brotados en el prodigioso “Mato Groso” amazónico.

Entonces, haciendo alardes de su inmadurez contumaz, estos prospectos de seudo intelectuales les sobrevino la abulia por sufrir los embates de su débâcle spirituelle et morale, tanto como debió saltar Joyce en su 'carrera de obstáculos" hacia la inmortalidad, al enterarse de que sus ídolos, supuestos parangonables y hasta imitables por sus fanáticos y seguidores; quienes les suponían semidioses imperecederos, en su idolatría desenfrenada de ideales juveniles, advirtieron estos que no eran los tales inmortales. Sino, burdos copycats al carbón, ni siquiera parecidos a los “Inmortales de Jerjes”

Luego, por decantación suplicante, recurrieron en busca de toldos sucedáneos aceptables y; de un tirón; se auto incluyeron en las primeras filas de los amigos de esnobismos como la 'condición humana', valorada y arrastrada desde el siglo XIX, base y conejillo de Indias del existencialismo sórdido; bidireccional; quizás el adelantado por la esposa de Sartre; Simone de Beauvoir; incluyendo per se estamentos de una Uclonía siempre antisocial. Una parte sensible de los jerarcas sociales pensantes a nivel mundial, decir la Intelligenza cautiva que ensartó a algunos rabo e’ mula tontos, enfundados en sandalias del Soho o las peripatéticas demodé del Corzo bratislavense.

Indiferencia, candidez o ¿miedo?

Porque tal parece que a James Joyce, según opiniones, no estaba muy atento a los ruidos de comunistas y el resto del bagazo socialista y sus fetos culebrinos; sin olvidar a sus notables primo-hermanos (además de discípulos innovadores) los sorprendentes por su sempiterna letalidad teutona, los nazi-fascistas. Notables por su sordera e indiferencia ante el clamor de sus víctimas; tal si las mismas nunca hubiesen existido o que les pasaron de largo por el lado izquierdo; compresible en los fanáticos monoaurales del maoísmo indoloro. Unos entes quienes presumen de poseer una única oreja izquierda y que para más desgracia de la cual es sorda, ante los gritos de sus víctimas torturadas.

Tanto como aquel "corajudo y justo" izquierdista de mala cepa y corresponsal del 'The New York Times', el benemérito y nunca bien ponderado Herbert (née, Lionel) Matthews; un maoísta contumaz y otro de los integrantes del coro de megáfono de la extrema izquierda liberal, norteamericana. Este 'individual matricial' nato, quien al parecer, se rumoreaba seguía órdenes del Comintern tropical, teatralizó una "entrevista" con el entonces líder guerrillero Dr. Fidel Castro Rus en plena foresta de la Sierra Maestra, dando a conocer al mundo de sus lectores y curiosos asiduos a su columna semanal. Se trataba de la existencia de un foco guerrillero (aforados irregulares), dado por eliminado por fuerzas del gobierno batistiano; durante su azaroso naufragio por el sureste de de la provincia de Oriente, en Cuba, provenientes en un yate desde Tuxpan, México. Según Batista, por entonces Presidente (de facto) tras su golpe de estado al Presidente constitucional Carlos Prío. Esa partida exigua de revoltosos, era la que Moscú necesitaba destacar bajo un plan aprobado por Stalin, un tiempo antes de su muerte en marzo, 1953. La saga vanidosa armada por Castro y sus seguidores, es otra historia.

Matthews, un periodista de fama, igual a la que le reflejaba insuperables brillos lunáticos en su rebote formal; devino ente incapaz (como parte de su trauma ecléctico) de emitir siquiera, el esbozo de un simple aflicción como traidor a la democracia, los valores básicos y pilares, en que se basan los sentimientos patrióticos de sus coterráneos, ciudadanos norteamericanos de su país. A saber, nunca se le conoció un clímax confesional de un cierto arrepentimiento, ni siquiera como intención hipócrita. Vale que este apóstata norteamericano, tal es dado a los comunistas, nunca soltó ni una lágrima de de cocodrilo por su desvarío senil.

Decir, a las plumas viles de la otrora piñata comunista, de intra y extramuros del Berliner Mauer (Muro de Berlín) el tan conocido como símbolo vergonzoso de la otrora real “Cortina de Hierro” donde los empaladores comunistas hacían de las suyas contra los secuestrados y aterrados por el “Big Brother” de turno (siempre hay un sinvergüenza dispuesto a vestirse de represor) por haber entregado su alma a las doctrinas “castro-guevaristas” del tremendismo revolucionario auspiciado por aquellos otros, incapacitados de deshacerse de la brida mental, del vampírico Khmer Rouge maoísta. Ello, quizás tanto doloroso, siniestro y desilusionante, como la posible falsedad de la trasmigración karmática, tal vez gordiana, de cada alucinado con el pensar y quehacer sinistrorso (cierto que levógiros) tales hacen los relojes dalinianos que se derriten. Decir, que Joyce versó entre otros tantos acertijos ideológicos de quehaceres mendaces, como en sus vinculaciones teóricas con un utopismo comunista, lo que se eleva tal presunción imposible de palpar (ni aun para Santo Tomás de Aquino)

Pero sí que a las plumas verdes les devino caudal de anti-filosofía o manual de alquimias; para fabricar los raros ‘hombres nuevos’ de la “Generalitat Oca” (de las gansas hispanas necias, repetitivas de cada consigna habanera) quienes de manera definitiva por su virtual inexistencia además de ser discuerdos; no mostraron ni un solo triunfo local (y menos mundial) de la inepta “Dictadura del Proletariado” Apuntan que dado el fracaso, se auto incineraron en crear prototipos humanoides, cierto que de los más baratos.

Biblia Negra

Nada parecido a la imaginación de un Joyce con su “ULYSSES” o la sensibilidad de “Las Cuatro Estaciones” de un Vivaldi, sonrojado por su virtual tonsura sacerdotal; no lograda ni por la casualidad sacar algo de las mezclas empobrecidas en retortas de los “Camaradas Cacos" Incapaces de fraguar, siquiera un Proust asustadizo por “Las Flores del Mal” en medio del montón de libros que sus panegiristas zurdos les dedicaron al alter ego del charlatán por excelencia del siglo XIX, el tal Karl Marx en su obra inentendible del “Das Kapital” y el peor de sus discípulos caribeños fracasados, el también diplomado, Dr. Fidel Castro Rus, bañado tal y ungido entre obleas marxistas candongueras, en favores ajenos. Y no son sartas de epítetos gratuitos y desmedidos a causa de su seudo filosofía, vendida en calidad de “esperanzadora de la igualdad” bajo el brazo, basada dicen, como en los cuentos de Callejas y que ellos titulan “Manual del Marxismo-Leninismo” Biblia Negra de portada amenazante bajo la axila izquierda de los comisarios, de ahí el concepto de “comunistas sobaqueros” de libros que nunca abren en público.

Es que el noctambulismo de Marx y otros, como tantos agoreros del futurismo utópico y sus seguidores ya juramentados, patrocinó el paternalismo esclavista (justificación del comunismo científico) que les conduciría de cabeza hacia la tina de la “Dictadura del Proletariado” A este filósofo, una especie de sociópata autodidacta aun no convencido de su estupidez, le dio por la no muy rara facultad de ofrecerse en calidad de ‘mecenas social’ y no vaciló en proponer la solución mágica de tomar y aplicar el producto laboral de sus vecinos, reviviendo y manoseando viejos conceptos del cuándo, cómo y qué hacer con las riquezas generadas por otros. Una conspicua base filosófica de los ancien caciques del comunismo tribal. Ello porque de hecho, lo impondrían sin aprobación de los intereses personales de cada integrante del clan.

Nunca existió la ‘repartición’ igualitaria de la pobreza, indigencia y miseria total, a la que serían sometidos todos los atribulados habitantes de este planeta, una propuesta de Ellos, los impertérritos. De donde les ha dado por llamar ‘igualdad’, que a las claras significaría regalar, lo que otros sudan y producen. Y no se trata de ser solo una literatura intrascendente ‘a la dernier’, tales fueron una vez las pantaletas rojas. Porque los marxistas, se las pasan admirando de soslayo las bolas tan sugestivas del triunfante Wall Street Bull (Charging Bull) clavado en Manhattan, USA; tras la inesperada débâcle spirituelle et morale; que sufrieron con el derrumbe de la satelitera comunista, supuesta y pregonada como nido inmutable, de los sinvergüenzas perfectos. No más, montaron la rabieta pueril sin cesar de criticar al 'capitalismo cruel', mientras que en medio de sus corrupciones ocultas, lo disfrutan a sus anchas.

Y todo, porque el derrumbe de su proto imperio de estolideces, el intento terminó en alcantarillas. Las mismas que corren en terrenos de la antigua RDA, por detrás del “Muro de Berlín” la basura que atrasó a los europeos por 40 años y a los cubanos todavía nos tienen andando empantanados ya, por los 60 años) Cotas donde se inicia ese cintorine (cementerio ya cerrado) que fue “el paraíso de vidrieras” de la satelitera rusa. También porque al armar tal muñeco del silencio vacuo, casi inalterable pero permanente, además de significar un proto Golem praguense genuino, devino en algo tan pequeño como la isleta mortuoria de Ávalon. Tales sus reiterados fracasos en cada experimento económico-social, con promesas de igualar en pobreza absoluta, a toda la Humanidad.

Porque los teóricos de las bondades comunistas, han sido incapaces de advertir que se trataba de una burla hacia distopismos cadavéricos, no celestiales, que nos pintaban los marxistas sobaqueros y los artesanos nobles de otras tantas acrobacias y filigranas falsas; basadas en un seudo utopismo contaminado con sartas de disparates. Turbios como aguas de los bajos fondos parisinos que Marx nunca vio ni quiso visitar. Donde pululan capas irredentas de lúmpenes proletarios, amigos todos del demagogo mayor; ese mismo sinvergonzón de Karl Marx; souteneur de los otros saltimbanquis masters, tal fue per se, Engel, responsables ambos de todas y cada una de sus víctima de la demencia totalitaria comunista.

En esencia, estos líderes perversos, sucumben ilusiones ante el aburrimiento clásico y perruno de las masas obedientes. Estas almas, después de ser envilecidas a base de su conculcación ideológica bajo atragántelas etílicas, incesantes. Luego (hoy) estas riadas obsoletas se acercan a esas orillas tremolantes de furias por el engaño; en busca de vindicaciones justicieras tal sucedió en Cuba en ocasión de la “Revolución del 33”, en la Cuba republicana y democrática, entonces a manos de generales y doctores.

De tal absurdo deviene la denuncia que hace esta página del blog, acerca de la aberración colectiva y consecuente humillación de las masas cubanas como latinoamericanas (la población toda, sin atender a ningún factor o data poblacional) entre otras consecuencias y secuelas, trata los materiales publicados en el blog, “El Asunto Cubano” que titula este sitio web.

Plumas y liras, las viles y las perversas

Vale para las plumas viles y perversas, que no fue en el caso de Joyce, el otro “el americanito", su contemporáneo Pound, observó que éste prospecto inglés encajado dentro del grupo democrático del pensamiento de la época, denominada, resplandeciente como la "Generación Perdida" 5 donde hicieron conjunción y se agruparon caracteres (todos norteamericanos) del calibre literario de Ernest Hemingway, John Steinbeck, F. Scott Fitzgerald, John dos Passos, Ezra Pound, William Faulkner, E. E. Cummings y Archibald MacLeish y otros de intentos casi iguales al propio James Joyce, su colega de letras y avatares literarios (a causa de un cúmulo de razones o sinrazones), el inefable Pound, le resultó intragable. Sucede que los personajes de “ULYSSES”, aunque según la trama andaban desilusionados con los tiempos en que vivieron sus personajes cimeros, "Leopold Bloom" y "Stephen Dédalus"; resultaron personajes propios de un drama interior y cúspides principales en la obra.

Esta expresión fue popularizada por Ernest Hemingway en sus obras “Fiesta” y “París era una fiesta” Algunos incluyen también y por circunstancias diversas a los escritores Ezra Pound, Djuna Barnes y Dorothy Parker. Es que todos, al menos los escritores e intelectuales de esa época, apuraron gestiones para ser mencionados en ese danzonette de jubilosos (wiki) Porque, en la sub trama de los caracteres dublineses; éstos se enterarían años más tarde del significado explosivo de todo aquello que aquel minigrupo de personajes hicieron durante un cierto tiempo, en Dublín. Como los atrapados en el film “Dublineses” (1987) de John. Houston) según el relato “Los Muertos” (1987) homónimo, también de James Joyce.

Por entonces, bordeando las sorpresas quiméricas del personaje proto siniestro del Doomsday 6 (españolizado como "Día del Juicio Final") junto con Molly Bloom; fue cuando dejaron desbordar desde sus conciencias, los ya conocidos monólogos interiores, estupendamente largos. Tal estilo literario, además de los diálogos multiformes; crearon una corriente espontánea alimentada por un buen número de autores que les siguieron, donde ambos personajes evidencian comportamientos de dureza masculina. Tampoco ella, Molly, quedó atrás en su feminidad escondida, no podían estar al tanto de que la narrativa descriptiva de ese otro de los tantos días aciagos, indudables, que les engrandecería.

En las voces de serios y destacados intelectuales de nuestra Indoamérica, Irlanda seria paridora de toda una pléyade de soñadores alucinantes. Todos los cuales estaría bajo la mirilla fiscalizadora (un lapsus tempore) de los azorados aduaneros de la “Gran Manzana” como un indiscutible dechado norteamericano. Porque Joyce, conocedor del impacto literario de su obra, se situó como meta cardinal, y que logró a mandíbulas batientes, cautivar la sonoridad latente del lector norteamericano.

“ULYSSES”, no es el “Odiseo” de la “Ilíada”

Ello sucedió en ocasión de la entrada a los EE.UU. de este libro relacionado y descriptivo de la trama inusual, contentiva de una saga que, además de ecléctica; nos contaba por medio de monólogos largos, inspiraciones que eran narradas justamente por sus personajes. La temática expresiva del drama fluía con suavidad, casi sin dejar espacios a rellenar por la imaginación del lector acerca de una tenida por odisea contemporánea, sin serlo. Se trataba de la novela homónima de Joyce, que tratamos. El “ULYSSES”, mejor, con el tras trasfondo paladeado, sin insinuarlo; con reminiscencias del avatar experimentado por el héroe mitológico impregnado con la itinerancia de aquel aventurero homónimo (Ulisses u Odiseo, el de la “Ilíada”) Un personaje reinventado por Homero o, sencillamente, reconformado por este último como reseñador a partir de un sinnúmero de historias cargadas de personajes protagonistas de hazañas o actuaciones, acarreadas generalmente en crónicas, relatos u otras manifestaciones semi reales, semi verídicas o simplemente míticas.

Los oficiales de Aduanas decidieron actuar en base de la reseña primordial de la McKinley Tariff Act (de 1890). Porque en virtud de dicha Acta se facultaba al Bureau de Aduanas de de los EE.UU. además de sustentar y constituir la misma casi de hecho, un mandato con fuerza de ley. Resaltó de manera curiosa, que dicha Acta no era más que una percha colgada al cuerpo del espíritu original de la ley, aunque con la misma fuerza legal. Es de considerar, que en base del mismo mandato, los ‘oficiales aduaneros tenían el poder de confiscar obras literarias, pinturas, esculturas, etc. hasta esperar por mayores averiguaciones y criterios de otras instancias administrativas, si la validar o no la decisión inicial.

Entre otros artículos, estaba cualquier libro, folleto, impresión o semejante literatura importada, que los funcionarios en ‘acto de primera mano entendieran y consideraran’ rezaba la Acta en cuestión, ‘por el libre albedrío’ éstos funcionarios que “sin ser especialistas en la materia’, el determinar cuándo lo estimasen conveniente y a los fines de salvaguardar los valores decentes de la sociedad norteamericana; que el contenido, redacción o intención de una publicación extranjera fuera declarada o no, obscena de origen o de lo contrario, decente y pudorosa”

En esencia, tal era el caso de la rejección inicial de la obra literaria de “ULYSSES” del escritor inglés, James Joyce. Pero, en 1930 el asunto del ‘sí’ o el ‘no’ acerca de de posible impudicia contentiva en el “ULYSSES” de explotó públicamente en las ‘Cortes Federales’, pero letrados bien informados de su profesión, advirtieron a los segundos y/o terceros literatos, lectores y revisionistas del contenido del libro en cuestión, con conocimiento de causa; se supo que los cuños de "libelo" u "obsceno" sólo podían ser aplicados en los EE.UU. bajo la Sección 305 del Título 19 del Código.

Estas facultades legales de verificar particularidades acerca de obras estimadas; susceptibles de catalogarse al menos de ‘impropias’ típicas que en los estados modernos, molestan a algunos. Sin embargo, en esencia constituyen en alguna forma sana; dispositivos de protección de la sociedad y sus derechos y salvedades espirituales, éticos y morales del ciudadano común; ya sea por desconocimiento o confusión de los encargados de la decisión; sean vulnerable a expensas de ideas foráneas destructivas de la moral y valores de los sistemas democráticos, tales son los dogmas marxistas-leninistas y su amoralidad manifiesta, se decía a manera de ejemplo. Iniciada la práctica de la censura oficial por el estado, se hizo común, bajo diferentes grados de tacha y materiales sobre los cuales se ejercería el rechazo eventual, en casi todas las naciones.

Las personas educadas y con recursos para adquirir obras impresas, constituyen por lo general; una parte de la población conservadora y es la produce valores y riquezas en las áreas sensibles, además de patrocinar y conservar bajo su peculio, las “Bellas Artes y las Letras”, entre otras actividades. Ello con la mayor independencia, sin considerar los intereses de los creadores de las obras, fuesen vinculadas a las artes o las letras.

De donde la sociedad norteamericana entendió sano advertir de que el resto poblacional, que suman millones, son las agrupaciones de personas incultas (vulgo), decir, no aquellas de las clases altas; apenas con educación elemental; a causa de la dejadez de sus gobiernos o la simple elección o albedrío propio de cada individual, el cual que decide motu proprio ignorar lo inherente a su superación cultural.

Ello, presumen los censores, les conduce a dejarse arrastrar al cieno fanatizado, por ejemplo, con el sucedáneo mental de sumergir sus fracasos personales como idealistas emprendedores, empleando su tiempo en actividades improductivas tales en calidad de fanáticos o adictos per se de los deportes o el sibaritismo desenfrenado.

Es el archiconocido ‘pan y circo’ donde prolifera ese mismo vulgo de seres endógenos auto excitados Se referían a las agrupaciones ciudadanas (multitudes de fans) decididos a que su acceso único a la información; descansaría en rumores (chismes) de la prensa amarilla o lo escuchado y visto en las medias; en la actualidad y en especial, dispositivos personales (p.ej. celulares) y no en la percepción lógica de sus cerebros.

Luego, los escritores por general casi siempre narran para el primer sector de influencia, las clases altas educadas no para el segundo, el ‘vulgo’ Claro que un cierto sector de escritores del siglo XIX crearon obras de sentido social (naturalismo literario), tal lo fue Emilio Zola, mejor, Émile (née, Édouard Charles Antoine) Zola.

Ello devino que la Literatura por su franqueza personal devino como medio expresivo rey, influyente sobre la moral, ética y política; aunque de inicios limitada a los alfabetizados, cultos y pudientes de comprar la prensa escrita y los libros, todas personas inteligentes.

Medias y propaganda

Con la aparición del cine, el nivel de acceso a la información se igualó para todos los integrantes de esa sociedad específica (los no analfabetos), sin importar el nivel cultural ni del tamaño de los medios económicos. La sociedad, quedó impactada por la aparición de la nobel industria cinematográfica, la cual hizo explosión popular coincidente con las turbulencias propias de la pos “I Guerra Mundial”, etapa de donde surgieron los totalitarismos comunistas y nazi-fascistas. No tardo sin que Nazis, Fascistas y Comunistas saltaran sobre este novedoso elemento, el cual muy hábilmente fue explotado por los bolcheviques y sus primos nazis. Bien temprano, tanto los bolcheviques crudos originales, como los nazis exóticos, domesticaron por el terror y el miedo a toda una pléyade de intelectuales, doblados en alabar a sus alimentadores.

Ejemplo palpable resultó en ocasión del film ya mencionado, "Acorazado Potemkin" (Bronenósets Potiomkin) del realizador Sergei Eisenstein, 1926; considerado uno de los filmes politizados hasta el tuétano, en conveniencia del estado bolchevique vencedor y destructor del zarismo autocrático y la esencia y residuos esplendorosos, de toda la sociedad rusa culta y civilizada, en especial la citadina.

Esta obra cinematográfica de Eisenstein, la cual tomó muchos elementos narrativos y cámaras del cine mudo, plagiados del norteamericano D.W. Griffith (ver la obra, criticada generalmente como racista, en bastantes aspectos, la epopeya fílmica "The Birth of a Nation"); devino catalogada entre los filmes más importantes en la Historia de la Cinematografía, pero con el sambenito de ‘infame’ Claro que poblada de defectos e inexactitudes. Aparte de sus dotes expresivas, ignorando el empujón de la intelectualidad izquierdista; liberal, populista, morona, oscurantista, vaga y enemiga de las democracias, al servicio de la maquinaria de propaganda del estado y dictadura bolchevique.

Hoy vemos notable, que estas experiencias se nutrieron de inmediato, como pudieron, los nazi-fascistas y el resto de los totalitarismos, incluyendo los islamitas teocráticos y fundamentalistas, muy mal aconsejados por sus líderes religiosos. Joyce, quizá vio pasar por su lado las tremenduras totalitarias de los ejércitos imperiales de las cuádrigas y troicas, tanto las nazi-fascistas como las comunistas; permaneciendo quieto, tal vez. Porque si repasamos la documentación contemporánea nos tropezaríamos conque ello nos conduciría a constatar que entre la Intelligenza de entonces, los hubo que ante el terror de aquellas bandas; no dudaron en aliarse al “Eje de Acero” con Hitler, Mussolini, Stalin, Tojo u otros depredadores.

Tanto como ayer fueron los emperadores reyezuelos, sátrapas y tiranuelos de toda laya integrantes de las culturas indoamericanas precolombinas, ‘porque en todas partes cuecen habas’ quienes tiranizaron por siglos a millones de sus siervos por sátrapas verdaderos, todos proto esclavistas por excelencia.

Como sucedió entonces sucede todavía en ciertos lugares y bajo estilos y modalidades diferentes refinadas por nazis y comunistas. Y también hoy, de modo igual en el resto del planeta Tierra y en cada uno de sus mundos; también por antonomasia en África, Medio Oriente, Asia, Oceanía y otros sitios. Mientras que en esta época vemos un mundo contemporáneo y democrático pugnando por salvar a la Humanidad toda, de los restantes depredadores.

Decir, impedir como sucedió durante la “II Guerra Mundial” cuando los “Aliados” debieron luchar duro para evitar la destrucción de las naciones democráticas. Es obvio que no existen dudas en quienes fue la Entente o coalición de los “Aliados” liderados por los EE.UU. Nación que se enorgullece de ser la más antigua y próspera democracia del Planeta Tierra. Decir, son muestras de nuestro propósito y lema inigualable de la obra “El Desafío Norteamericano” Al menos, así nos ven tanto nuestros amigos como nuestros competidores.

La saga continúa.

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Addendum

(Dispensas por estar en construcción)

(1)

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