miércoles, 15 de marzo de 2017

¿Nostalgias por el Castrismo? I/II

¿Saudades por el Castrismo?
I/II
Se cumplen 58 años de dictadura comunista en Cuba
  
“Un Asunto Cubano”  

"Las grandes obras de las instituciones
 las sueñan los santos locos,
las realizan los luchadores natos,
 las aprovechan los felices cuerdos
 y las critican los inútiles crónicos"
  Kioto
(Poeta japonés)

«¡Oye Tú, "comuñanga", hey, hey, wake up and listen to me! Porque esos ruidos que escuchas no son “arrullos de palmares”, sino el estruendo de la patria que se nos derrumba encima. Sobre los residuos de todo aquello que gente como Tú, pedazo de animal, nos han destruido¡» 

Nostalgias y otros “Gleichschaltung” cubanos
Mejor no, porque las nostalgias denotan sumisión e inmadurez. Mientras que la segunda aseveración implica, en el decir de los alemanes otrora confundidos, estar sincronizados y aceptar los disparates del régimen nazista. O lo que es igual, aceptar como algo decente, la denominada "Gleichschaltung" (Sincronización) Esta fue una idea hitleriana impuesta y conculcada a todos los alemanes devenida más tarde en cantera de los hacedores del Holocausto; decir, una actividad criminal cocinada por los ideólogos del nazismo incipiente (1933) coincidente con el ascenso de Adolph Hitler a Canciller Imperial) El objetivo era (atiendan los cubanos atontados con la monserga castrista, el resto de los comunistas descerebrados y sus ahijados izquierdistas embobecidos) a los fines de lavar el cerebro a los alemanes y alinearlos entre sus fieles juramentados. En esencia, los canchanchanes, soplatuberias y los inevitables chicharrones, de una forma u otra todos cómplices Der Führer (el Líder Máximo) En términos de los europeos sanos, el arribo posterior de los ocupantes bolcheviques (II Guerra Mundial) condujo a los checoslovacos, siempre imaginativos, a bautizar a estos bárbaros catequizados con el apodo de "bolos" Ello, por lo de bolcheviques. Lo cual inclinó a inscribir finalmente a estos fans sumisos y afectos a cualquier burocracia opresora, en Europa Oriental u otros copycats independiente de la latitud, con en apodo de "besaculos" Es entendible que a estas personas adoctrinadas dentro de la imaginación y las visiones de náufragos y legionarios, acusan síndromes infinitos, prolijos y además, como seres incurables. Los enemigos de la democracia en Cuba y los EE.UU. son adictos a estas torceduras y sufren endemias múltiples, las cuales son dispersada en calidad de  supuestas fallas autóctonas o singularidades propias de la ya inexistente idiosincrasia del cubano

            Nada de eso. Estas manifestaciones estructuran las falacias izquierdista, tal si no fuesen propias de la esencia totalitaria. Lo que no es más que una mendacidad orquestada y esparcida, por los medios, cronistas e historiadores castristas (fabricadas en serie en sus troqueladoras propagandísticas) Luego, es la razón devenida como reflexión impropia, el plantear en cada victimado sentires de añoranzas o saudades nostálgicos por sus victimarios, aplastados en la honorable Animal Farm, montada en Cuba como un manicomio perfecto bajo la supuesta desgracia de "a la cubana utópica" Proliferar el vagabundeo, odio al trabajo y el escamoteo socialista, es la receta adecuada para el fracaso actual.

            Parecerá inverosímil para algún que otro estudioso o curioso, la persistencia e inmovilismo de los dislates estremecedores, denunciados en el "Asunto Cubano" Estas sinopsis breves son callados por los medios de los victimarios isleños propiciadores, tal si los hechos fuesen atañibles a las víctimas. Sucede que los izquierdistas, zurdos además y arquitectos del asilo mental isleño; entienden solo aquello expresado en el lenguaje torcido de las lenguomanias propias de los hábitats totalitarios. 

            El tema se vincula a una defectación lingüística advertida, reconocida perfectamente, en una parte apreciable de los cubanos arribados a los EE.UU. y otras regiones, sin retorno a vistas. Se observó que no se trataba de un fenómeno adimensional de tipo grupuscular. Sino parte de una espiral evolutiva in crescendo, articulada por los compañeros, a fin de abarcar y ensuciar a sectores impensables por su educación esmerada. Era la pleyade intelectual, interrumpida en el seno del flujo inmigratorio proveniente de Cuba.

            Saber que por su naturaleza los hechos son imparables, desde enero 1 de 1959. Ese día nefasto, todas las cartas válidas de la conciencia nacional quedaron al pairo, revueltas para siempre. Tal evento ganó atención al coincidir con el arribo al poder, tras una etapa opositora insurreccional de violencia extrema, por los ya denominados “mau-mau” (nom de guerre tomado de los guerrilleros africanos independentistas del líder de la tribu kikuyu, Kom Kenyata durante los años 50) 

            Ese flujo indetenible y maravilloso de emigrantes isleños, que escaparon rumbo hacia alguna de las decenas de diásporas que conformaron la esencia del exilio político, resultó como una bocanada de aire nuevo. Distinto como el emponzoñado de los insurrectos bolcheviques, varados aullantes en sus cuchitriles (es que sus Comandantes no lo dejan salir) tratan de apagar las humaredas de los cubanos penantes y atormentados. Los mismos que edificaron sus castillos de arena en desiertos o playas ajenas; conformados en más de medio siglo sobre tierras allendes o como se dice, ‘donde quiera que el Diablo dio las tres voces’

Gargantua
Caricatura burlesca del Rey de Francia
Luis Felipe I de Orleans, 
Obra de Honoré Daumier (1831)
Por esta critica, el artista

 sufrió  seis meses de prisión
(Cortesía de Olga's Gallery y wiki)
            Quizás también en tierras y parajes tan lejanos que escapan a nuestra imaginación y al sentido común de estos otros criollos quienes, ya hartos, decidieron ‘jugándosela al canelo’ y embarcarse en esas expediciones que vuelan cúmulos y cirros o surcan olas sin importarles a donde van a caer o carenar. Porque les viene necesario al no advertir siendo niños, a que mundo habían llegado y del por qué los músculos de una fuerza militar tirana les trataba como ciudadanos ‘legítimos’  de tercera, cuarta o quinta clase y todo, en su propio país. Suponiendo sus atormentadores que los cubanos, ya amansados por el 'tentetieso cabrón que te partimos los coj...', no se rebelarían. 

            Es que, tanto dura en el tiempo el estado opresor, más cuánto  perdurará lo subliminal del mensaje oculto en el subconsciente de la víctima nacional. Luego la función residente, época temporal inducida, peligra tornarse en residente permanente en el trans consciente de la ciudadanía. Es el tósigo insuflado de manera casi inadvertida para el gran victimado, el pueblo; quien acepta la sumisión total como un mal menor para su supervivencia y la de los suyos. Lo cual, niegan los opresores, porque ya no es más, así.

Ello al cuerpo nacional le conduce ya tornado piltrafa miserable, a una angustia de profundidad insospechable. Al final de aquellos horrores, las tales no personas abrazan la desesperación por sentirse y verse en cualquier espejo, como unos esperpentos inermes, según la clasificación oficial de los Comisarios. El mismo mundo que ya se les antoja "de mierda” cuando más tarde percibe (eso es al final) que su crisálida explota incapaz de contener la rabia y escapa de la granja a través del primer agujero que encuentra. Duele entonces, que esos ciudadanos no dispusieron en su momento  ni tan siquiera, de un inofensivo hollejo de naranja a manos, para soplárselo por la cara a esos Líderes Máximos.

            Todo porque en ese idílico mundillo comunista, asi le mentan los zurdos al marxismo sobaquero; los Comandantes lo rebautizan cada por año de su victoria sarracena como “Utopía del siglo XXI”; que ni siquiera es tal en el papel; sino (Cuba) una inmensa ergástula en manos de una tiranía dinástica de tipo tan cotidiano, como lo es el fascismo de la izquierda, en el pensar de un filósofo occidental de la talla de Jürgen Habermas, adherido a la Escuela de Frankfurt, Alemania. Mientras, la izquierda norteamericana, sigue disfrutando en su jugoso limbo populista, a costa de dineros la Clase Media o embadurnando con su ptialismo a los Líderes Máximos que les mantienen su activismo foráneo aquí en los EE.UU. a expensas del pueblo cubano, que les ve bailando el "cangrejo perenne" con el logo del rotativo neoyorquino  (NYT)

Ya sin los opresores, nos llega la alegría de saber a los viajeros superviviendo vivitos y coleando, aunque de inicio lo hagan a grupas de un dromedario. Solo que ‘la cosa’ cardinal se nos traba con el ‘nuevo habla recortado’ observable en una parte sensible por su tamaño, de estos isleños desarraigados de su hábitat (terruño) cualquiera que sea ese punto de libertad alcanzado a mordiscos y pezuñasos. Porque el objetivo del tema trata acerca de uno de los destrozos castristas tan sutiles que casi no lo advertimos bajo el estado emocional, en estos emigrantes contemporáneos a la fuerza y también a priori. Prefiero denominarlos “itinerantes” (de un pie aquí y otro allá) a los miles arribados a EE.UU. y otras tierras generosas.

Ellos, por desgracia constituyen un grupo enorme de abofeteados que hoy son millones, como un grito bien audible además de lamentable, al provenir de seres indefensos, cuya única arma pacífica tal es en las democracias, el votar con los pies. Ello ha sido objeto y da la impresión trágico-cómica, de tratarse de personas afectadas en ciertas líneas intelectuales, lo cual es imperceptible para la mayoría de estas personas, por la acción subliminal corrosiva (confusión criminal), una especie de sarna cautelar de las retortas comunistas y la conculcación de dogmas inenarrables e irreconocibles al sentido común. Estas deficiencias del habla, gramaticales, sólo pueden ser parangonables con los personajes y anti-héroes de las obras de George Orwell. Para los guerrilleros castristas (no los de otras facciones veteranas) el modo de vida a normar por los totalitarismos elimina todo vestigio de aromas y misericordia humanista.

Luego el hablar y decir limpio estable el expresarse, de la lengua materna, ser honesto, emprendedor, aseado, feliz, soñador, innovador, de buenas costumbres y maneras y otras cualidades, dado que en el breviario expedito del Manual de Marxismo-Leninismo y otros vademécums, tales virtudes son diagnosticadas como vicios y malos hábitos del ancien régime capitalista. Además de connotaciones indeseables, sospechosas y razones por las cuales, el ciudadano debe ser pasado por una criba, a fin de expurgarles tales impurezas (como los machos, al arroz) Tal si padeciera de algún grado de ‘aburguesamiento’ producto y simpatía por el ancien régime , lo cual les haría ser considerados excluibles en la denominada integración al dogma con todos los votos de fidelidad y frugalidad en la nueva sociedad revolucionaria. Saber que en la cosmovisión planetaria nazi, este “todo o nada con el estado” se denotaba la “Gleichschaltung” (Sincronización) una especie de un hipnotismo concordante con todo ordenado por el estado. Que en el idioma de mi barrio, cualquier mequetrefe de los Hombres Nuevos en su manual, copycat de un viejo adagio autorepresor del INDEX censor castrista, inexorable, se pudiese interpretar la Sincronización de la mente con el dogma como,  

"Dentro de la Revolución todo y fuera de la revolución, nada" 

Lo chabacano, primó entonces para estar átono, sobre el resto de las modas y modos capitalistas, todos sentenciados a ser destruidos, aunque solo en la mente, bolsillos, sueños, deseos y estómago del hombre común. No, ni de jaranas pensar, en que con ese rasero igualitarista se mediría a los "héroes" de la estafa comunista, emplantillados en la cúpula de los líderes y sus allegados. Todas las clases y estamentos sociales y sus patrimonios cayeron en la criba estatal a fin de ser cernidos. El Gran Hiato dispuso enmendar y erradicar tales cualidades execrables con ayuda del vicio del “mal decir y peor pensar” propio de los liberales, siempre en francachelas con todos los perdidos del barrio.

Luego, dichas peculiaridades defectadas en el habla, pero con todos a sabiendas de que sus causas eran independientes del grado educacional, cultural, profesional, región, filiación política, religiosa, étnia u otras causales. De donde el cubano optó por camuflar aquello tildado de desagradable a los gobernantes. Especificamos, referidos al hábito de los arribados, en hablar el español tal si este no fuera su lengua materna. Ello derivó en el surgir de una especie de fala o caló (no sustitutiva), sino de expresiones onomatopéyicas intencionadas con parecidas a nuestros idioms y slangs, intrínsecos de todas las lenguas.

Los interlocutores notan dicha peculiaridad tal si se tratase de personas educadas por asiáticos, en especial los de origen y lengua china. Esta no es una aseveración chistosa o de una expresión de mal gusto. Porque esta desazón es notoria, dado que los chinos no saben pronunciar la letra "r" (ere) Ello motiva por cual sustituyen la "r" por una "l" (ele) Lo notable es que la mayoría de estos arribados de hoy por el puerto y país de donde procedan, pronuncian de modo igual, p.ej.: vel (por 'ver'), comel (por 'comer') o trabajal (por 'trabajar'), etc. y así hasta el infinito del destrozo verbal. La autopsia a la escucha atañe a los verbos regulares, sin conocer a ciencia cierta, que harían con los irregulares. Imaginar que este destrozo en los verbos, de continuar, implicaría la gramática de un Nuevo Español, lo cual es intolerable, a causa de unos descuidados. Tal ha sucedido y sucede a lo ínfimo o no se nota en otros idiomas y países hispano parlantes. A ello se unen otros defectos lingüísticos en la escritura y lectura. Hay que darles una nueva oportunidad a los victimados, para vergüenza de los victimarios.

Es reiterar que estas manifestaciones en el habla, no son  las dificultades naturales experimentadas, por cualquier inmigrante que choca con culturas distintas a la propia, que incluyen el lenguaje, religión, costumbres, historia, herencias, etc. del país receptor. El país receptor y por circunstancias excepcionales, no es el elemento productor del síndrome pandémico. Hoy un cierto número de disciplinas como la Gramática y su sintaxis, prosodia y ortografía; entre otras innumerables peculiaridades, muestran estar bien dañadas en Cuba, tanto o más sucede de una forma u otra en los demás países. A contrapelo de lo anterior, ejemplificamos de manera tacita que: 

"Por lo general, cualquier natural oriundo o autóctono tomado al azar de una etnia indígena de la Mesoamérica; lo cual es una vergüenza como los logros revolucionarios” aventados desde La Habana como ejemplo de una “Saudade ; pronuncia mejor el Idioma Español, con más nitidez, limpieza, belleza y además lo hace al natural con un 100% de calidad verbal superior a la del cubano medio"

Ello no se refiere a las capas superficiales en los modos de expresarse. Sino que la devastación ya se advierte, si vale el tropo, en el tejido muscular que soporta el lenguaje. Las alarmas se refuerzan con los resultados docentes, cuando dichos inmigrantes ingresan al Sistema Nacional de Enseñanza de los EE.UU. a fin de engranarse en la sociedad norteamericana. Son profesionales, técnicos, obreros, etc. de iguales deficiencias lingüísticas a los fines de revalidar títulos académicos, sin una base mínima del idioma natal, luego ello redunda en la imagen y veracidad escolástica atribuida a la educación formal de los egresados de nuestras prestigiosas Universidades norteamericanas.

De una y por todas, este mal no es endémico de los cubanos todos, sino que se denota en una parte notable de los "hombres nuevos" (en minúsculas, dado que al parecer provienen de alquimias) tal pretenden los ideólogos comunistas. Todo el plan, tácticas y estrategias son endógenas (generadas en la Cuba de intramuros y no en la de extramuros) Una aspecto similar al intento confuso de  proto Holodomor incipiente, inducido en nuestro Archipiélago de las Grandes y Pequeñas Tierras, atribuido igualmente a los extranjeros norteamericanos o si quieren, a los Chivos de la Quirino o a la Madre de los Tomates, si algo les peda. 

 ¡Pero por Dios, dejen en paz al Embargo

El daño al Idioma Español a intramuros, en el “Archipiélago de las Grandes y Pequeñas Tierras” (Cuba), implantado desde Enero 1, 1959 hasta la fecha; al igual que el resto de los desastres acaecidos por efecto del “Socialismo del siglo XXI” impartido en Cuba en su versión estalinista, ha sido descomunal. Decir, tan temprano como desde mediados del siglo XX, que asola la isla. Tales son los estragos actuales, semejantes a los europeos por causa de la II Guerra Mundial, pero sin que en Cuba existiera una guerra. Los daños, perdurarán por generaciones enteras antes de que, por efecto de la democratización, todo vuelva a su cauce natural.

«! Acere boncó, tébere  monina,  mi Ámbia!, ¿dime, si tengo o no razón?»

         La saga continúa.

© Lionel Lejardi, Marzo 1, 2017
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